Corrupción y la profesión contable
"al final del día tácitamente los Contadores, revisores y auditores son funcionarios públicos"
La corrupción en Colombia no surge en los últimos años como se cree, ésta viene de tiempo atrás pero hasta ahora está saliendo a la luz pública. Casos como el de la DIAN, el desfalco a la Salud, el carrusel de la contratación (cuyo caso más sobresaliente es de los Nule, porque hay que decirlo, el carrusel de la contratación no solo es de los Nule, hay más como por ejemplo la contratación en funcionarios públicos por nominas paralelas, el escándalo por posibles sobornos para la adjudicación del contrato de doña Juana y la prórroga del mismo en años anteriores, entre otros). El caso de los Nule es el más conocido, tal vez por estar involucrados dirigentes políticos de gran importancia en el país como el ex Alcalde de Bogotá y su hermano, y tal vez los hijos del controvertido expresidente de la república Álvaro Uribe Vélez pero que pese a su poder político no dejó que esto sobresaltara (Dicha afirmación se basa en las reuniones que sostuvieron en Panamá), o por ser el más "desangrante" del heraldo público.
En ésta reflexión no entraremos en discusiones políticas o en especulaciones sobre lo ocurrido, pues lo importante es hacer una reflexión sobre la Contaduría Pública y sus diferentes ramas del ejercicio en los casos antes mencionados.
¿Por qué los contadores y/o revisores fiscales del Grupo Nule no advirtieron sobre lo que estaba pasando? Por ejemplo.
Los profesionales de dicha disciplina son unos de los pocos que dan Fe pública y por ende sus responsabilidades no son solo con la compañía que los contrata ni el estado, pues el grupo de interés es mucho mayor y más si se tratan de compañías con tan gran peso y relevancia en el País, empresas que manejan recursos ciudadanos, de personas que en su gran mayoría luchan por conseguir al menos para un arriendo y sus alimentos basicos. El concepto de Stakeholders es amplio (pues abarca desde los accionistas hasta empleados de la compañía, clientes, proveedores y demás) y por ende la rendición de cuentas debe ser clara, oportuna, y aunque no tendría que mencionarse porque se supone es inherente a ésta, debe ser transparente.
Los contadores y auditores tal vez se ven en una encrucijada ya que sus ingresos son gracias a las empresas contratantes y es por ello que surge una perdida de independencia y por ende ética, perdida que esta afectando al buen nombre de la profesión porque se debe aclarar que son pocos los profesionales de la contaduría los que están envueltos en casos semejantes, pero como se diría en el argot popular "por unos pagan todos". Entonces surgen discusiones como por ejemplo ¿por qué estos servicios no los paga el estado?
Pues sí, si se espera tener una independencia mental del 101% debería ser el estado quien por medio de dichos profesionales intervenga en las compañías y adicional sea quien remunere a los contadores y/o auditores (al final del día tácitamente los Contadores, revisores y auditores son funcionarios públicos), porque el pensamiento de las personas y más cuando se tiene necesidades es: "siempre se sirve a quien bien le paga".
Esta frase es la que se debe analizar en el caso de los Nule, pues como lo mencionaba el docente y profesional de Contaduría Pública Diego Fernando Católico "no es lo mismo que a fin de año regalen una botellita de vino a un carro", pequeños obsequios que siempre llevan una doble intensión y hace que muchas personas pierdan su moral y principios no solo profesionales, también personales.
Leandro Gutiérrez Ruíz
@LiandroGutierre